Una entrada para encontrar tu hueco en el mundo kink.
Como sumiso quieres servir. Quieres que te traten de ciertas maneras y satisfacer los deseos de los Amos: hacerles felices y por lo tanto ser también feliz. Pero hay muchos caminos distintos para llegar a lograrlo. Cuando eres un novato en el mundo kink primero has de saber cómo eres y dónde encajas. Para ello te ayudo a saber qué opciones tienes.
Elije tu caracter
Dentro de la comunidad hay distintos tipos de sumisos y estilos que la gente suele seguir y que les ayudan a definirse. Estos no son todos los tipos que hay, hay muchísimos más, pero sí los principales. Vamos a ver solo los principales roles en los que puedes identificarte. Las descripciones las he hecho de manera superficial e incluso cayendo en ciertos tópicos, no se trata de que entiendas a la perfección en que consiste cada uno de ellos, si no en tener una vista general de ellos. Hay otras entradas en el blog que te pueden dar una vista más profunda al estilo que más se adapte a ti, también puedes quedar con gente que tenga los mismos fetiches para que te lo expliquen más a fondo. Volvamos al principio, debes encontrar que haya uno en el que te definas a la perfección, pero también puede pasar que sientas que te gustan ciertos aspectos de cada uno. Es totalmente normal, no hace falta que te ciñas a uno, la gente no suele tener en cuenta los límites entre cada uno, si no que suele haber ciertas mezclas para cada
Sub
Un Sub o Sumiso le gusta ser un sirviente sexual. Le gusta ser obediente, torturado o incluso realizar otras prácticas BDSM. Pero la mayoría una vez salen de la cama se convierten de nuevo en chicos normales. Suelen tener su propia independencia y gestionan sus propias vidas. Simplemente que les gusta ese tipo de sexo.
A veces en su día a día suele ser una persona dominante con su pareja, incluso aunque sea una zorra en la cama.
Hijo
El perfil del hijo siente la necesidad de ser guiado, de sentir la calidez de alguien cercano y a quien admirar. Una persona de confianza y a quien seguir, básicamente una figura paternal. Incluso aunque suelen haber ciertas tendencias dominantes, una relación papi-hijo no necesariamente tiene que tener sexo (aunque la mayoría lo tienen ? ).
Lo más importante en esta relación es la confianza y la guía que el perfil de padre pueda ofrecer.
Mascota humana
Las mascotas son un poco distintas a los otros dor perfiles. Ellos prefieren sumergirse en el rol de que son una mascota, ser tratada como una, hasta el más básico instinto. Se olvidan de las preocupaciones de ser humano y se diverten convirtiéndose en una mascota para su amo. A pesar de ser sumisos, muchos de ellos lo hacen por diversión y lo importante no es seguir al pie de la letra las órdenes de un amo, si no de traer buenos momentos al amo y risas. Como una mascota real hace.
Esclavo
Mientras que para el sumiso su rol termina fuera de la cama, los esclavos más más lejos. Ellos quieren ser guiados por alguien, tal y como se hace en las relaciones papi-hijo. Aquíí el control y la dominación son mucho más importantes. Para los esclavos la motivación está en server a sus amos y hacerles la vida más fácil.
Algunos viven completamente como esclavos, se deshacen de todos sus derechos y obeceden al amo completamente.
Sumisión con un toque de Dominación, por favor
Los roles de arriba te muestran la sumisión de distintas formas. Pero hay algunas personas que a pesar de ser sumisas también tienen un lado dominante en su carácter. Muchos lo descubren después de haber hecho varias veces de sumiso y suelen estar un poco confusos. Algunos incluso creen que es que no encajan como sumiso, pero hay algunos roles que tienen en cuenta este detalle y que permiten identificarte dentro del mundo kink.
Alpha
El Alpha sigue siendo un esclavo, sumiso, hijo o lo que sea. Pero dentro de la jerarquía de roles está un poco por encima de otros. Tiene cierta responsabilidad sobre otros sumisos, a pesar de que sigue sirviendo a su amo. Básicamente es una posición intermedia.
Si su parte dominante es aún mayor que eso, puede convertirse en un co-amo, le sirve pero también es servido.
Switch
El switch se diferencia del Alpha en que puede actuar tanto de amo como de esclavo, y no necesita de ningún amo más cuando actúa de él. Mucha gente prefiere ser switch por la facilidad de poder intercambiarse según vean, incluso hay parejas de switch que cambian de posición entre ellos ya que sienten que encajan en ambos roles.
¿Qué soy yo?
Como he indicado son descripciones muy generales sobre los perfiles. Mucha gente suele encontrar su rol inmediatamente y sabe que es lo que quiere hacer. Aun así hay gente que al inicio se puede sentir un poco perdida por no saber dónde encajar. No te preocupes, no se trata de elegir uno y tener que encajar a la fuerza o pensar que es para toda la vida. A lo largo del tiempo te irás conociendo mejor e irás cambiando entre unos roles y otros. Incluso puedes ser dos roles a la vez.
El saber hacer viene condicionado por las experiencias
Sí, es el típico cliché. Pero tiene mucho de verdad en muchos aspectos de la vida. En este también.
A muchos sumisos le suele gustar se obediente en la cama, quieren que otros tomen ciertas decisiones por ellos. Algunos querrán pasar más tiempo con su amo y pasarlo bien. Otro querrán ser guiados, pero no sentirse como una marioneta. Otros además tendrán cierto carácter dominante, u querrán mezclar ciertos aspectos del rol de mascota a su rol de sumido. Lo que quiero que entiendas es que hay muchas mezclas. Lo más importante es que vayas viendo con qué estás a gusto, que quieres esperiemntar y cuales son tus inquietudes e intereses.
Cambio
Puede ocurrir que algo que te gusta ahora te desagrade dentro de 10 años. Tus intereses cambiarán y es totalmente normal. Por ejemplo hay muchos que empiezan como sumisos y después se declaran amos, pasa muy a menudo. Puede tomar algo de tiempo reajustaer, pero una vez lo haces puede ser muy interesante explorar una nueva faceta de ti mismo.
Confianza y Precaución
Para hacer todas estas prácticas y cambios necesitarás a alguien. No importa como de masoquista seas, si te gusta notar un golpe en los huevos, por muy bien que te apañes solo no será divertido. Por suerte, hoy en día en muy fácil encontrar a personar con los mismos intereses. Simplemente te abres una cuenta en Planetromeo o Recon y empieza tu búsqueda. Pero no debes quedarte con la primera persona que te pregunta si eres sumiso, esclavo o lo que seas. Lo mejor es chatear con la gente y encontrar a alguien que desprenda confianza y tenga los mismos intereses que tú.
Exploración segura
Hemos escrito muchos sobre esto, pero es que es realmente importante. En cualquier relación sexual o con un dominante debe de haber un consensuo mutuo. Por supuesto, en BDSM, habrá cosas que no querrás probar y lo avisarás, por ejemplo, si no te gusta que te aten o te golpeen, pero para el resto de prácticas sí debe de haber consenso, si no estás seguro al cien por cien infórmate y toma la decisión con tiempo.
Hay una gran cantidad de prácticas que pueden resultar abusivas. Un buen Amo nunca te presionará para hacer algo de lo que no estés convencido. Es importante para él que te sientas en un entorno seguro y confiable en el que te dejes llevar. Si no te convence alguna práctica dilo inmediatamente e intentad resolver la situación. Si hay algo que te asusta o incluso aterroriza, el amo deberá de saber calmarte y poder seguir avanzando, si no lo hace directamente tomad un descanso y no forcéis la situación.
Puedes ver más sobre este tema en entradas sobre iniciación. Podrás aprender incluso sobre medida de seguridad que es importante tomar.
Nota final
Un consejo personal, es importante no renunciar completamente a algo. A veces tu compañero no es el adecuado, no tiene la suficiente experiencia o pasa algo mal durante la práctica. Puede ser una experiencia divertda o simplemente dejarte un mal sabor de boca. Pero eso nunca debería de ser la razón para no volverlo a intentar. Puede que la siguiente vez sea completamente distinta. Si abres tu mente a más oportunidades puede terminar siendo una experiencia muy reconfortante y además te permita redescubrir esa práctica que no te convenció la primera vez.